40 cumpleaños - Autorretrato terapéutico

He sentido como la vida se me desmoronaba a mis 39.
He creído que no había ninguna salida.
He pensado que todo por lo que había trabajado-luchado-vivido no tenía sentido.
He perdido salud, sueño, sueños y esperanzas.
He encontrado más puertas cerradas que abiertas.
He creado más que en toda mi vida adulta.
He mirado a los ojos a la muerte.
He notado un alma salir de entre mis brazos.
He abrazado a la tristeza sintiendo a la pena acercarse.
He alcanzado la cima de la frustración.
He tenido que soltar el control.
He delegado porque lo he necesitado.
He puesto límites a amistades insanas.
He desaprendido tanto que ahora siento que lo tengo todo por aprender.

Y así he recibido a mis 40, la nueva década. Con la que echo la vista atrás mirando hacia delante y muy centrada en cada paso que voy dando.
Un ser de luz me dijo el otro día que por muy dura que se me pone la vida resurjo con valentía. Y es que tengo una poción para ello; AMOR, HUMOR y FE.